Con la llegada de las fiestas del Milagro, Salta se paraliza para celebrar a sus patronos. Aún sabiendo lo especial de esta semana, hemos asumido seguir con los ensayos, redoblar nuestros esfuerzos, y tratar de ver terminada la obra en su conjunto.
Gracias a Dios, se van acercarndo las donaciones. El dinero previo es indispensable para contar luego con el dinero de las entradas y destinarlo a las tareas misionales de la comunidad.
Confiamos esta bella empresa en manos del Señor y la Virgen del Milagro. Que en esta novena comenzada ayer, nos concedan cumplir con el objetivo que nos hemos propuesto desde siempre: hacer un apostolado, transmitir el mensaje de vida y fe de nuestro Padre Don Bosco.
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